Recuerde el alma dormida,
avive el seso y despierte
contemplando
cómo se pasa la vida,
cómo se viene la muerte
tan callando;
cuán presto se va el placer,
cómo, después de acordado,
da dolor;
cómo, a nuestro parecer,
cualquiera tiempo pasado
fue mejor.
Este texto, perteneciente a la primera estrofa de las coplas de Jorge Manrique por la muerte de su padre, inspiró el título de una fotografía de Cristina García Rodero, primera y única fotógrafa española miembro de la mítica agencia Magnum.
La obra muestra a una niña, vestida en tonos claros, saltando en la puerta de un cementerio. Fue tomada en 1.981 en Saavedra (Lugo) y se encuentra en el Museo Reina Sofía de Madrid.
El contraste entre la vida y la muerte y la mirada de la niña, que supo captar Cristina, dan lugar a una foto que de tan real se convierte en irreal y más que enseñar, sugiere...
La mitad invisible, el programa de Juán Carlos Ortega, se centra en esta fotografía; un género, lamentablemente, poco valorado históricamente dentro de los museos y centros de arte.
Me he gravado el programa, lo tengo bien guardado, lo he visto ya unas cuantas veces y en todas ellas lo he disfrutado... Espero que a vosotros os pase lo mismo...
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