El otro día mi esposa encontró un saltamontes en la persiana de una ventana y me avisó para que lo quitara de ahí. No lo pensé dos veces, después de cogerlo, tenía que sacarle unas fotos al "bichito" antes de soltarlo.
El animal, a causa del frío (nunca había visto un saltamontes casi a mediados de diciembre) se encontraba adormecido y no tuve problema alguno para cogerlo.
Con ayuda de un folio en blanco y un flexo con una bombilla de tungsteno (las de toda la vida), improvisé un pequeño estudio fotográfico. Monté el 50 mm. con las lentes de aproximación en la cámara y ésta en el trípode. Sólo me dió tiempo de realizar unas pocas fotos, ya que el calor de la lámpara sacó al pequeño animal de su letargo y empezó a pegar saltos por la habitación. Comprendí que se había cansado de la sesión... y que era el momento de ponerlo en libertad (por supuesto no sufrió ningún daño...).
Con ayuda de un folio en blanco y un flexo con una bombilla de tungsteno (las de toda la vida), improvisé un pequeño estudio fotográfico. Monté el 50 mm. con las lentes de aproximación en la cámara y ésta en el trípode. Sólo me dió tiempo de realizar unas pocas fotos, ya que el calor de la lámpara sacó al pequeño animal de su letargo y empezó a pegar saltos por la habitación. Comprendí que se había cansado de la sesión... y que era el momento de ponerlo en libertad (por supuesto no sufrió ningún daño...).
En el momento del revelado, sólo tuve que ajustar el balance de blancos para que el color de la escena volviera a su normalidad.
Datos de las tomas:
Cámara: Sony DSLR-A700
Objetivo: Sony DT 50 mm. f1.8 SAM
Close-up Hoya +2, +3, +4
Velocidad: 0,3 seg.
Diafragma: f20
ISO 100
Velocidad: 1/10
Diafragma: f11
ISO 100
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